El T-50 coreano, principal sustituto del C-101 «culopollo»

El T-50 coreano desplaza al resto de pretendientes para sustituir al C-101

La reacción contra el ataque de Corea del Norte determinó el interés de Corea del Sur en el Eurofighter y España se adjudicó la formación de pilotos surcoreanos, a cambio del T-50

Alberto Abajo

El acuerdo firmado entre el ministerio de Defensa de Corea del Sur y el Ejército del Aire español, para el estudio de una fórmula de “cooperación en el entrenamiento de pilotos” de combate, firmado a primeros del pasado mes de marzo, parece despejar las dudas sobre el futuro sustituto del viejo CASA C-101, el entrenador avanzado español y avión de la Patrulla Águila. El acuerdo significaría, por un lado, la puesta en marcha, en España, de un “centro” de entrenamiento para pilotos de ambos países, según medios internacionales, y el debut en el mercado internacional del T-50 Golden Eagle, un potente entrenador supersónico desarrollado por Korea Aerospace Industries y la estadounidense Lockheed Martin, con capacidad como avión de ataque a tierra, que Corea del Sur lleva intentando vender, prácticamente desde que hiciera su primer vuelo, en 2002, y que, hasta el momento, no habría conseguido.

España sería, así, su puerta al mercado internacional. Aunque, paralelamente, Corea del Sur ha alcanzado también un preacuerdo para suministrar diversas unidades del T- 50 a EEUU, que ampliarían aún más el listado de aviones de entrenamiento avanzado que utilizan la USAF y la Armada estadounidense. Sería el octavo modelo de avión con esta misión de la fuerza aérea estadounidense y el décimo de la US Navy.

La repentina irrupción del T-50 llega en un momento en el que el Ejército del Aire parecía estar trabajando a dos bandas. Por una parte, continuaba con las pruebas de diversos modelos de aeronaves de entrenamiento de tipo turbohélice, iniciadas, hace algunos años. Aviones como el Tucano o el Texan II ya habían sido probados por pilotos militares españoles, con vistas, no a su adquisición directa al fabricante, sino a una posible compra de segunda mano a algunas fuerzas aéreas, entre las que destacaría la aviación de la Armada estadounidense. En ese mismo capítulo, habrían encajado, también, las pruebas que, el pasado mes de febrero, se hicieron, en la base de San Javier (Murcia), con el muy moderno Pilatus PC-21 que utiliza la fuerza aérea suiza.

Del posibilismo a la alternativa

Ésta sería la opción más posibilista y en la que se llevaba trabajando más tiempo, determinada por una situación económica no precisamente boyante, que no sólo afectaría al presupuesto español de Defensa, sino al de otros muchos países. Pero todo parece indicar que había una ruta alternativa que otras instancias estaban recorriendo.

El ataque de Corea del Norte a la isla surcoreana de Yeonpyeong , a finales de noviembre del año pasado, sirvió de lamentable acicate para que Corea del Sur decidiese dar un giro a su esquema de defensa aérea, interesándose por aviones como el Eurofighter. A este respecto, todo parece indicar que el país asiático entraba en disposición de utilizar su nuevo entrenador avanzado (y “tan” avanzado, además, porque el T-50 puede ser un potente avión de ataque a tierra) como moneda de cambio en las negociaciones.

Eurofighter españoles por T-50

Y es que, cuando corren tiempos en los que el dinero no sobra, se recurre al trueque. El rumor sobre el intercambio de una primera remesa de Eurofighter españoles por T-50 surcoreanos y el estudio de un replanteamiento de precios tanto del avión de combate europeo para Corea del Sur como del T-50 para el resto del área de influencia EADS, sea o no cierto, encajaría en la lógica amplitud de cualquier “declaración de intenciones”. Asimismo, la puesta en marcha de un centro de entrenamiento de pilotos en España (o, más probablemente, de un “mecanismo” de intercambio) encajaría también en el adiestramiento de pilotos surcoreanos en el manejo de Eurofighter y en la sustitución del C-101.

La agregaduría de Defensa de la embajada española en Seúl demostró algo más que reflejos, entrando en discretas negociaciones con la fuerza aérea surcoreana. De hecho, lideró la “opción alternativa” para la sustitución del modelo de avión de entrenamiento avanzado español. El acuerdo fue firmado, el pasado 2 de marzo, por representantes del ministerio de Defensa de Seúl y del Ejército del Aire español, coincidiendo con una visita a la capital surcoreana del secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez.

Caza y ataque

Caso de confirmarse la amplitud de este acuerdo, el C-101 ya habría encontrado a quien recogiese su testigo. Y es más, porque un mero vistazo a las posibilidades técnicas del Golden Eagle identifica a esta aeronave, no sólo como un excelente avión de enseñanza avanzada, sino también de formación en caza y ataque. Tiene velocidad supersónica y dispone de una versión bastante digna de ataque a suelo: es de creer, por lo tanto, que cuenta con versión de entrenador biplaza para la misma. Y así, a la escuela de caza y ataque de Talavera la Real (Badajoz) podrían llegar alumnos y alumnas mejor formados y más familiarizados con la aviación de combate.

Queda por ver cuándo entraría como nueva montura para la Patrulla Águila, sustituyendo al viejo Culopollo, si es que lo hace . Porque esto es harina de otro costal, con su propio y peculiar despliegue de especulaciones. ¿La “absorción” de los C-101 de Matacán (Salamanca), por parte de la AGA, permitiría que la formación acrobática continuase en activo con el mismo modelo histórico que motivó su nacimiento? ¿Se atendería, por el contrario, al concepto de que la Patrulla Águila está integrada por instructores de vuelo que demuestran sus capacidades, a los mandos del modelo que de hecho utilizan?